Para la edición número 38 del Festival de Tango de La Falda que tendrá lugar los días 22 y 23 de julio en el Anfiteatro Carlos Gardel, dos figuras del dos por cuatro serán los conductores de lujo para el evento tanguero más importante del país. Se trata del inmenso Silvio Soldán y la gran Carmen Barbieri. Ambos artistas consagrados, dúctiles y dueños de esa prestancia que exige el escenario tanguero.
Silvio Soldán es el señor tango, por todo lo realizado por este género tan rioplatense y tan arraigado también en el sentir de los cordobeses. Desde la pantalla de televisión allá por 1972 cuando se puso al frente de Grandes Valores, el conductor con su inconfundible voz, convirtió ese espacio en el lugar perfecto para hacer brillar a los consagrados y también para dar el empujón imprescindible a los nóveles cantantes.
En diálogo con Ivana Ferrucci, Silvio Soldán se refirió al presente del tango en Argentina y en el mundo y a la felicidad de volver al ruedo, luego del parate obligado de la cuarentena.

Ivana Ferrucci: Silvio, feliz de volver al ruedo.
Silvio Soldán: Sí, volvemos al ruedo en este gran Fesival de Tango que tiene el tango, valga la redundancia.  En el mundo hay muchos festivales de tango, pero este, incuestionablemente es el mejor.
Ivana Ferrucci: Y este año con Carmen Barbieri.
Silvio Soldán: Sí, me encantó porque la quiero mucho a Carmen y además Carmen es nieta de uno de los guitarristas de Carlos Gardel, de don Guillermo Desiderio Barbieri, así que por sus venas corre tango. Lo vamos a hacer de la mejor manera posible y Carmen sabe mucho de esto y además es una artista muy impresionante Carmen.
Ivana Ferrucci: ¿Cree que aún le falta reconocimiento al tango?
Silvio Soldán: A nivel nacional el tango no está pasando por su  mejor momento, está pasando por un momento de cierta escasez, pero a nivel mundial el tango sigue funcionando muy bien como hace muchos años ya. El tango gusta de verdad en el mundo entero: En Europa, en Estados Unidos, en Asia. El tango funciona muy, muy bien. Y acá con altibajos  con momentos en que funciona muy bien y con momentos en que está de regular para abajo. Y este no es el mejor momento, pero se va a reponer seguramente. De repente aparece un cantant o una orquesta que la rompe y bueno se convierte en una figura del tango, porque un artista importante te lleva todo el resto de los artistas.
Eso es lo que pasó cuando apareció Rubén Juárez, lo mismo con Jorge Falcón. En estos momentos tendría que aparecer alguien nuevo que pegue, que guste, que convoque y se lleva todo el tango puesto sin dudas.
Ivana Ferrucci: ¿Por qué  se da esto que está como planchado el tango en Argentina?
Silvio Soldán: Justamente porque no aparecen artistas nuevo. Imaginate en el folklore  en los últimos diez, doce, quince años fueron apareciendo figuras muy importantes y muy convocantes: Soledad, Los Nocheros, Los Tekis, El Chaqueño Palavecino y tantos otros. Entonces el folklore se mantiene muy vigente, mucho más que el tango, al tango le están faltando figuras nuevas y convocantes para que se lleve todo puesto.

Ivana Ferrucci: ¿Le falta juventud al tango?

Silvio Soldán: Es probable, porque lo nuevo llega a los jóvenes y cuando aparece alguien que es joven, toda la juventud también se acopla.