No pudo ser para el matador que armó una verdadera fiesta en el Mario Alberto Kempes, colmando las instalaciones del escenario mas grande que tiene Córdoba en materia de fútbol, con aproximadamente 55 mil personas que no pudieron ver concretado el sueño de clasificar a la semifinal de la Copa Libertadores.

Poco para analizar de un partido trabado, mas disputado que jugado, y con un Talleres que fue eficazmente contenido por su rival en toda la primera etapa.

En el segundo tiempo salió a vender cara la clasificación y por momentos parecía que se lo llevaba puesto.

Pero la ineficacia para crear una jugada que pusiera a algún jugador frente al arco con posibilidad de marcar, mas el cansancio por llevar el gasto del partido, mas los cambios que esta vez no dieron resultados, confluyó para que faltando 15 minutos para el término del partido y en una jugada en donde la figura de la serie, Janson, metiera un pase entre líneas para dejar solo a Fernández que definió de manera impecable ante un Herrera que poco pudo hacer para evitar la conquista visitante.

Talleres eligió mal los caminos, quizás a Garro le hacía falta un compañero para la gestación de juego y no reemplazarlo para que Fértoli ingresara al campo de juego para la nada misma.

Quizás probar desde afuera cuando ni por lo laterales ni por adentro le podía llegar de manera cómoda al rival podría haber sido una opción. Se la paso tirando centros muy altos, a las manos del arquero visitante que nunca tuvo un tiro comprometido en contra de su valla.

Mas allá de eso, el equipo intentó ir al frente, con sus armas, con su ilusión, con el empuje de su hinchada, pero con pocos argumentos futbolísticos para arrebatarle la serie a un Vélez comandado por Lucas Pratto, que se corrió todo, y que fue el jugador mas inteligente de la cancha por lejos.

Fín de la historia, pero una historia que dejó momentos imborrables para el hincha albiazul. El desafío es jugar mas instancias de copa, disputar instancias importantes tanto en el plano internacional como en el plano local, codearse con estas definiciones, para acostumbrarse a esta clase de partidos.

Todavía le queda la Copa Argentina por delante, y un campeonato en el que va a tener que levantar ahora mas que nunca,

Habrá que asimilar la derrota tanto en el campo de juego, como en la comisión directiva y como en las tribunas, para llevar tranquilidad y seguir por este camino que tantos buenos frutos le ha traído en los últimos años.

Fín del sueño, a despertarse que todavía hay cosas por jugar.