Quique Spada es un histórico vecino de Nueva Córdoba y se acercó a disfrutar de la inauguración de las obras en la Plaza España.
En diálogo con Ivana Ferrucci, Spada señaló:  “Nosotros veniamos a jugar acá y mi padre nos traía siempre a la Plaza España. Estaba el monolito al medio y había una torre con un saturno que era la primera propalación de Córdoba donde se propalaba música y mi madre me contaba la historia de lo que es una propalación”, contó el histórico vecino de Nueva Córdoba.
“Después vino el Concilio Ecuménico y utilizaron el monolito de piedra para la base de lo que fue el escenario del Concilio y nunca más volvió a ser la plaza lo que fue en esa época, año 46, 47, 48. Era todo ligustro, pastos y acá veníamos a jugar todas las tardes con mis primos.”
Spada destacó también que el gran cambio en la Plaza vino de la mano del ex intendente Romanutti cuando contrató al arquitecto Roca para realizar allí una obra. “Nadie quería entrar por el peligro que era, porque quedó oscura”.
“Esta plaza está a la altura de cualquier plaza del mundo. Ahora tiene que seguir funcionando (la iluminación y la fuente de agua) y que sea un lugar de encuentro como es el Parque de las Tejas.”.