En una conferencia de prensa que tuvo lugar el día martes en horas de la tarde, Juntos por el Cambio explicó las razones por las que pidió a la Justicia que el escrutinio se realice con las actas elaboradas en papel y de puño y letra de las autoridades y fiscales de mesa y no las que validó el sistema Turing por las evidentes fallas que el sistema demostró.

Una de las cuestiones que más ponen en duda la confiabilidad del sistema es que hay una diferencia de 40 mil votos en la participación entre los tramos de gobernador y legisladores de distrito único, lo cual es imposible: la gente que ingresa a votar es la misma para ambos casos, más allá de que unos puedan optar por el blanco o por anular el voto.

Ese margen de 40 mil votos, cuando la distancia entre Martín Llaryora y Luis Juez es de 57 mil, enciende las primeras luces de alarma en Juntos por el Cambio.

“Hay mesas de 350 electores que tienen hasta mil votantes, también hay que sumar 462 mesas que no fueron transmitidas, lo que serían unos 100 mil votos, en muchos casos se dice que no había conectividad, pero en una misma escuela hay mesas que han sido transmitidas y otras no”, explicó Marcos Ferrer, intendente de Río Tercero y uno de los voceros de Juntos por el Cambio.

“No venimos a denunciar un fraude electoral, pretendemos que el acto eleccionario de Córdoba sea transparente, ese es el único objetivo de Juntos por el Cambio”, agregó Ferrer.

“Tendrán que aparecer los responsables porque el sistema ha fracasado, celebramos que la ciudad no vaya a usar el sistema Turing para la elección a intendente”, agregó.

Juntos por el Cambio también exigirá la Justicia que el conteo del escrutinio definitivo comience en cero, y no, otra vez, a partir de los datos del escrutinio provisorio.

Ernesto Martínez, presidente del Frente Cívico dijo enfáticamente que a pesar de las advertencias que se realizó a la Justicia Electoral sobre las fallas del sistema que ya se habían evidenciado en los comicios de Tucumán, igual siguieron adelante con la contratación de Ocasa por más de 2000 millones de pesos.

Por su parte Brenda Austin de la UCR  explicó que no se sabe la magnitud de las fallas del sistema.

En ese sentido Ferrer por ejemplo que en Tercero Arriba hay errores en la carga en el 25 por ciento de las urnas, por lo cual consideró que el resultado no se puede conocer.