Marcelo Santos se dió el gran gusto y festejó a lo grande sus 35 años con la música con gran asistencia de publico en el majestuoso Teatro Real.

El repertorio incluyó clásicos, temas propios, temas nuevos, todos interpretados de manera brillante y que hizo que el público vibrara a lo largo del evento.

Minutos después dialogamos con el artista que nos dejaba estas impresiones: “Que decirte, emoción pura porque fue algo que estuvo muy pensado pero no sabíamos que iba a pasar arriba del escenario, entonces eso realmente causa mucha emoción porque son momentos de mucha idea, de mucha vida recorrida, y cuando llega el momento hay que estar ahí  medios como fríos, pero lo disfruté muchísimo.”

“Estoy muy feliz, creo que no me equivoqué en lo que elegí, y lo siento muy bien, muy adentro, esperando que estas miradas hacia atrás me ayuden a seguir creciendo.”

Con una trayectoria de tantos años, sin dudas que el transitar ese sendero deja muchas enseñanzas: “Hay muchas piedras en el camino, pero cuando uno se tropieza hay que asumirlas y ahí está el punto” y resaltó “….creo que es un continuo aprendizaje, y cuando dijiste ya está, ya aprendí todo, la tengo clara, mentira…, siempre hay algo para aprender.”

Cuando le consultamos acerca de la evolución del tango a lo largo del tiempo y como lo ve hoy en día, esto nos decía el cantor: “Es un género que lamentablemente, si bien es patrimonio del mundo,  tiene muchos prejuicios, me parece que hay que seguir en la búsqueda y el punto está en no olvidarse los clásicos pero buscar nuevas letras, nuevas melodías, nuevos arreglos y mantener el color que realmente tiene el tango.”

En la charla pasaron anécdotas de cuando viajó a Centroamérica para incursionar en el Bolero, o cuando casi fue cantante de Chebere, en la época que el Toro Quevedo decidió irse como solista, coqueteos con otros géneros que no prosperaron porque según el artista, el cauce del río siempre vuelve a su origen.

Hermosa entrevista con uno de los mayores exponentes de la música ciudadana del interior del país, que se presentó en el Real acompañado de Lisette Groso, Valeria Martin, Claudio Duverne y Julio César Mattio.