El folklorista santiagueño derramó toda su idiosincrasia artística en el escenario de “El Nuevo Aljibe”, y Entretenimientos Córdoba aprovechó la ocasión para dialogar con el cantautor: “Yo me vine a Córdoba para estudiar en el 84′ arquitectura, y viven mi mamá y mis hermanas aquí, entonces es parada obligada, sí o sí siempre vengo, es mi segunda patria” y puntualizó “…y después soy muy cabulero, lo que no pasa por Córdoba no funciona, tiene que pasar por Córdoba.” 

Después de su paso por Córdoba, con el estudio y el canto, decidió desembarcar en Buenos Aires y de esto ya hace 32 años: “Allá hacía música en la calle, yo he sido artesano toda la vida, y de repente vino Mercedes Sosa y me sacó de un tren y me dijo ‘Quiero tu canción’ y me ha legitimado, porque si no seguiría acá en Unquillo o guardado en el Uritorco.”

Conmueve lo agradecido que se siente con Mercedes, por esa oportunidad que le dio para grabar su famosa El olvidao que le cambió la vida: “Sin ella yo no sería nadie, no soy nadie tampoco pero si ella no legitima todo esto, ella lo ha hecho conmigo y con muchísimos artistas, todo lo que ha tocado lo ha legitimado, ella es la que te da la chapa.”

La historia de El olvidao nació de una amistad que tenía con los sobrinos de la Negra, Claudio y Coqui,  que ya le habían grabado un par de canciones, y cuando estuvieron a punto de grabar El olvidao la escuchó Mercedes y se enamoró de la canción: “Ella decía: ‘¿Quién es El Duende, es un viejito? ¿Que vive en un hongo?’ Yo tenía el pelo largo hasta la cintura, campera de cuero, en la calle, y bueno, ella ha sido una mujer que ha sufrido mucho entonces ese dolor a nosotros nos unía, yo tengo un gran amor por ella y ella conmigo, algún día voy a escribir un libro cosas, yo agarraba la bicicleta, le tocaba el timbre y me iba a tomar el té” y los recuerdos empezaron a surgir a borbotones.

Finalmente finalizó diciendo: “Ella ha levantado esta chacarera que ya no me pertenece a mí, se ha ido por el mundo.”

Por último, nos dejó una semblanza acerca de nuestra música: “La música popular argentina está en una lucha tremenda, entonces, tenemos que tratar de cuidarla, estamos perdiendo mucha sangre, mucha gente que está viajando, que se está yendo, es cíclico, todo es cíclico, y nosotros necesitamos dar una respuesta, el trabajador de la cultura, no el artista, mal o bien, yo he elegido un palo social y me siento honrado que los chicos me lean y que pueda grabar con ellos y crear una nueva camada de chicos, tenemos que hacer docencia.”