Advierten que las adicciones son parte de la salud mental y no tienen que estar atendidas a través de políticas punitivas o de seguridad
Este viernes a partir de las 17 hs quienes reclaman por el derecho a la salud mental se autoconvocan en Colón y Cañada para desde allí marchar por las calles del centro de la ciudad de Córdoba. Es la décima edición de esta marcha, ya que desde que se sancionó la ley de salud mental en el año 2013 no se pone en vigor con la plenitud que ese cuerpo normativo exige. Desde el Colectivo Por el Derecho a la Salud Mental, Martín Pasini en diálogo con Ivana Ferruci explicó el alcance de la ley, los incumplimientos y la situación en materia de salud mental en Córdoba y Argentina.
Ivana Ferrucci: Contanos sobre esta marcha
Martín Pasini: Esta es la décima marcha por el derecho a la salud mental , es una marcha que comenzó en el año 2014 y que todos los años venimos reiterando, básicamente con el mismo objetivo cada año que es exigir la implementación de las leyes nacional y provincial de salud mental, que ya tienen 13 años (son del 2010) y que vinieron a impulsar una transformación muy grande en el campo de la salud mental.
Ivana Ferrucci: ¿De de qué se trata esa transformación?
Martín Pasini: Esa transformación tiene que ver con el modelo de atención que antes fue basado en neuropsiquiátricos, en hospitales manicomiales y que las leyes lo que vinieron a establecer es una perspectiva de derechos humanos, una transformación para un sistema de atención mucho más desplegado en los barrios en las comunidades, donde viven las personas y a la vez integrado en hospitales generales, no de manera segregada en hospitales monovalentes sino integrada al sistema integral de salud. Y por último es que esa legislación vino a interpretar la salud mental no como una problemática meramente orgánica o biológica, sino también atravesada por un montón de componentes que tiene que ver con lo social, lo económico, lo político. Esto es algo que siempre fue muy debatido y la pandemia dejó en claro que la forma que tenemos de vivir en nuestra sociedad afecta a las condiciones de salud en general y a la salud mental en particular.
Entonces estas leyes que vinieron a transformar de plano y que han sido consideradas muy importantes y muy valiosas a nivel internacional, después como sucede muchas veces , en el plano de las políticas que es donde se tiene que concretar queda un poco en la nada o se avanza y retrocede . O se avanza para vaciar lo que existe sin abrir lo que debiera existir, es decir sin abrir los dispositivos que sustituyan a estos manicomios.
Ivana Ferrucci: ¿Cómo se trabajó en estos años desde que se sancionó la ley en 2013?
Martín Pasini: Estos años hemos ido exigiendo a través de diferentes acciones que realmente se cumpla con lo que dice la ley, que también ha sido muy atacada por distintos sectores incluso hay políticos que dicen que hay que derogar la ley u otros sectores que dicen que tiene que ver con las clínicas de salud mental o con las comunidades terapéuticas. Son distintos actores que siempre fueron muy reaccionarios a pensar la salud mental desde una perspectiva de derechos humanos y que han atacado la ley, culpabilizándola de situaciones de crisis que se han dado, delictivas y demás y que en realidad son las consecuencias de no aplicar la ley. Por no haber acompañamiento ni apoyo a la persona , terminando sucediendo situaciones que después hay que lamentar y no es porque existe la ley sino porque no se cumple.
Ivana Ferrucci: ¿Qué solicitan puntualmente a partir de este incumplimiento de la ley?
Martín Pasini: Hemos resumido en diez puntos que pensamos que son diez claves para la aplicación de la ley y que pensamos que la futura administración público tanto a nivel nacional como provincial y municipal debieran llevar adelante. Estos diez puntos tienen que ver con : cierre de hospitales monovalentes y la apertura de dispositivos que sustituyan estos monovalentes , como casas a medio camino, centros de salud barriales , fortalecimiento del primer nivel de atención a la salud, es decir hoy en día en la ciudad de Córdoba la Municipalidad tiene alrededor de cien centros de salud barriales, dispensarios de esos , sólo en 20 hay profesionales vinculados a salud mental, eso es muy escaso y la situación en la provincia es similar en el primer nivel de atención de la provincia. A veces están fragmentados con servicios que no están interconectados . La persona usuaria rebota de un lado a otro entre los subsistemas de salud, los distintos niveles de salud donde en realidad debiera existir un sistema articulado que pueda funcionar mucho mejor. Otro punto tiene que ver con defender que los consumos problemáticos y las adicciones son parte de la salud mental y no tiene que estar atendidos a través de políticas punitivas o de seguridad sino a partir de políticas de salud y eso es algo que no se está cumpliendo y que está en la ley y que debiera implementarse para evitar tantos problemas que después trae cuando las respuestas no son de equipos de salud .
Ivana Ferrucci: ¿Realizaron algún estudio puntual en Córdoba con personas que requieren atención vinculada a la salud mental? Tienen cifras sobre la cantidad de personas que requieren atención más cercana
Martín Pasini: La salud mental no es sólo para un área de la población sino que es algo que nos atañe a todos porque todos somos susceptibles de tener dolencias o padecimientos mentales así como orgánicos en general . Por ejemplo un dato importantes es que en el área de Gran Córdoba , un 35 por ciento de la población no tiene cobertura de la seguridad social y por lo tanto son usuarios del subsistema público de salud . Si el 35 por ciento usa los hospitales públicos, podríamos imaginarnos que es necesario que ese subsistema en tanto atiende una porción importante de la sociedad, tenga los recursos y la estructura necesaria, es un indicador.
Ivana Ferrucci: ¿Qué pasa a nivel nacional?
Martín Pasini: A nivel nacional sabemos que alrededor de 16 millones de personas se atiende en el sistema público, es decir que en nuestro país y en nuestra provincia las personas que usan el sistema pública sin cobertura privada es un
Las condiciones materiales de existencia de la gente, de las poblaciones impactan en la salud mental en este caso de diferentes formas. No siempre significa hablar de patologías. No siempre tiene que ver con una atención clínica, sino que está más ligado a resolver los problemas que son sociales. El campo de la salud mental siempre se piensa desde una atención individual, con diferetnes dispositivos y en realidad está atravesado por toda la sociedad , y esto lo dejó demostrado la pandemia. También dejó demostrado que los problemas son sociales y tienen impacto en la subjetividad de las personas, las soluciones también tienen que estar en el plano de lo social. Esto está muy claro en la ley de salud mental cuando dice que la salud mental está ligada a políticas vinculadas con justicia social, derechos humanos , generar equiparación de oportunidades para las personas y obviamente el acceso al trabajo y la educación y la salud en general.